Las familias BIM son un elemento indispensable para desarrollar proyectos BIM con el nivel de detalle y precisión necesaria. En el post de hoy vamos a analizar las claves para planificar las familias de un modelo BIM de forma efectiva.
Diseñar un concepto previo
Para realizar correctamente una familia BIM es imprescindible tener un esquema previo bien definido. Una familia no deja de ser un objeto (una mesa, una silla, una puerta…) que tendremos que diseñar como un conjunto de elementos.
Lo ideal sería comenzar el diseño de la familia BIM con un dibujo a mano que nos ayude a definir los componentes de este objeto.Una vez tenemos el concepto claro, podemos utilizar familias anidadas, es decir, familias dentro de familias, para agrupar todos los conceptos.

Escoger la plantilla adecuada
Las dos plantillas más utilizadas para crear familias BIM son la genérica métrica y la basada en cara. La primera es ideal, por ejemplo, para un elemento de mobiliario.Pero si son elementos que están en techo o en pared, es recomendable partir de la plantilla basada en cara. ¿Por qué? Vamos a verlo en un caso práctico.
Imaginaros que tenemos que crear un elemento eléctrico que normalmente va en el techo, pero que puntualmente puede ir en la pared. Crear la familia BIM con la plantilla basada en cara nos permite situarlo después donde queramos, sin ninguna atadura.
Trabajar con parámetros claramente identificables
Cuando empezamos a crear los parámetros que regulan la visibilidad y las propiedades dimensionales de un elemento en Autodesk Revit, es recomendable que estos sean claramente identificables por sí mismo.
En una mesa, por ejemplo, no deberíamos poner anchura x altura x profundidad en general. Es más recomendable separar cada elemento y a continuación poner su parámetro. Por ejemplo. Pata.anchura, Pata.altura, etc.
A partir de aquí, debemos agrupar los parámetros por sus características: dimensiones, visibilidad, etc.La nomenclatura y agrupación de los parámetros es clave para realizar correctamente una familia en BIM.
Testear la familia BIM antes de que esté acabada
A medida que se va construyendo el esquema de la familia BIM, debemos ir testeando las diferentes propiedades en tres niveles. Primero, en el editor de propiedades de la familia, para confirmar que cuando variamos los valores no se generen errores. Luego, hacer la misma comprobación en el entorno de familias. Y finalmente, comprobar el funcionamiento de la familia BIM en el proyecto BIM.
Es clave subir la familia en el modelo BIM para hacer comprobaciones, aunque esta no esté acabada. Así podemos detectar qué está fallando a medida que se está creando la familia BIM, y así poder solucionarlos problemas.

Pros y contras de las familias anidadas compartidas
Las familias anidadas compartidas sirven para contabilizar los elementos de forma adicional. Por ejemplo, si queremos saber las baldas de una estantería, este método nos va a dar el dato al momento.
Sin embargo, también debemos tener en cuenta que trabajar con este tipo de familias en BIM puede generar problemas de rendimiento. Salvo en casos estrictamente necesarios, recomendamos no usarlas en la creación de familias BIM.
Registrar las distintas versiones de una familia BIM
Hay algo que en A3D hacemos con todas las familias BIM: Hacer un pequeño registro de las distintas versiones de la familia para evitar confusiones cuando esta se implementa en un modelo BIM.
Es importante tener constancia de cada elemento y de las mejoras que se han hecho en la familia. En el fondo, es una forma de tener una biblioteca de familias BIM más claras, completas y útiles en todos los proyectos.
Conclusiones
Como ya habréis visto, la clave principal para realizar correctamente una familia BIM en Autodesk Revit es trabajar de manera muy metódica. Solo partiendo de un esquema muy bien definido y siguiendo cada paso con orden, tendremos una biblioteca BIM de familias como la que tenemos en A3D.
¡No dudes en contactarnos si quieres saber más sobre el diseño de familias BIM!